jueves, 25 de agosto de 2011

Conmueve el musical “Si nos dejan” a viuda e hijos de José Alfredo Jiménez

¡HEY! • 25 AGOSTO 2011 - 12:55PM — NOTIMEX


Durante el estreno del musical que rinde homenaje a la Época de Oro del cine mexicano y al compositor, se fusionaron los lenguajes cinematográfico y teatral. La producción se presenta en el Centro Cultural Telmex.


Ciudad de México • El musical “Si nos dejan”, que rinde homenaje a la Época de Oro del cine mexicano y a José Alfredo Jiménez (1926-1973), al fusionar los lenguajes cinematográfico y teatral con impresionante escenografía multimedia, conmovió a la viuda e hijos del reconocido cantautor en la noche de su estreno.

“Muy bonita la obra, yo creo que mi esposo merece eso y más. Me trajo muchos recuerdos, pero les faltó nombrar a mi hija Paloma”, comentó Paloma Gálvez, viuda del artista, quien es considerado como uno de los mejores compositores de todos los tiempos al crear temas rancheros, huapangos y corridos, reconocidos por su calidad y su sencillez armónica, melódica y lírica.

Precisamente, fue ella quien le inspiró clásicos como "Paloma querida", “Ella”, “Tu recuerdo y yo”, “Paloma querida”, “El hijo del pueblo” y “El Jinete”, apuntó.

“Que mi esposo me haya compuesto tantas canciones es muy emocionante, verdaderamente, pero no cantaron todas, faltaron muchas. Hay cantantes españolas que las están grabando, Chavela Vargas ya no canta, pero interpreta todas”, expresó Galvez, quien convalece de una caída que le fracturó la cadera.

Al finalizar la función de este miércoles y a la que asistieron varias personalidades del espectáculo, José Alfredo Jiménez, hijo también compartió su sentir por la puesta en escena que se desarrolla con mariachi en vivo.

Los músicos interpretan varios temas de su padre, como “Cuando vivas conmigo”, “Serenata huasteca”, Vámonos”, “Cuando sale la luna”, “Amanecí en tus brazos”, “Ella”, “Camino de Guanajuato”, “Cuando tenía tu edad”, “No volveré”, “Paloma querida”, “El rey”, “Si nos dejan” y “La media vuelta”.

Por lo que señaló: “Interpretan muchísimas canciones no sólo de mi padre, sino del catálogo de nuestro país, nuestra música mexicana. Qué bonito que hagan una obra con nuestras tradiciones que llevan todo ese amor por México”.

“A mi padre le hubiera gustado verla, sobre todo cómo responde la gente a todas sus canciones”, comentó su orgulloso hijo.

Por su parte, su hija Paloma Jiménez, destacó: “Verdaderamente estoy sorprendida, es una obra que tenemos que repetir porque en un solo momento y con tantas emociones juntas no se puede uno dar cuenta de tantos detalles maravillosos, desde el punto de vista creativo tanto en la escenografía como en el guión.

“El libreto es excelente, el director también, y hay que seguirlo con tanto ingenio. Son muchas las cosas que te conmueven, que te llegan de verdad porque son parte de nuestras raíces”.

Este musical, dijo, no sólo es un homenaje a José Alfredo Jiménez sino a todo el catálogo ranchero, pues también se incluyen temas de Juan Gabriel, Manuel Esperón, Agustín Lara, Pepe Guizar, Gonzalo Curiel, Joan Sebastián y Cuco Sánchez, por mencionar algunos.

“Además, qué voces, las disfruté todas. Qué bueno que se hizo esto porque no debemos perder nuestras raíces y eso nos lo dice la obra. A mi papá le habría encantado; además, estos avances tecnológicos nos permiten soñar más allá, junto con el director”, puntualizó.

“Si nos dejan” se presenta en el Teatro 2 del Centro Cultural Telmex, bajo la producción de Ocesa Teatro, Morris Gilbert y Federico González Compeán.

La premisa de la obra es que un grupo de mariachis entra a un cine abandonado, el “Cine México”, en el Distrito Federal. Al subir un switch se acciona un proyector en el que se encuentra atorada la última película que se exhibió en aquel recinto.

Así comienzan a cobrar vida los personajes que por tantos años han estado ahí, “atorados”, para revivir la trama de una típica historia de amor del cine de la Época de Oro.

Sin embargo, el paso de los años ha hecho estragos en el celuloide, y muchas partes de la cinta se han borrado, por lo que los personajes las completan utilizando lo que tienen a la mano en aquel local empolvado; viejas butacas, latas de películas y antiguos carteles promocionales, entre otras cosas.

Es la historia de amor de “Paloma” (Leticia López) y “José Alfredo” (Mariano Palacios), ambos luchan por estar juntos y ser felices pese a los obstáculos que les impone “El rey” (Juan Navarro) y sus secuaces: “Peligro”, “Faifas” y “Barrabás”.

Se desarrolla en el escenario del teatro que este miércoles lució abarrotado, pero también con paredes desgastadas y barandales oxidados, a fin de remitir al público a la vieja época del cine.

Destacan todos elementos de un cine abandonado. Se construyen coches con carretes de proyector y con las linternas de los acomodadores. Luce también un viejo carro de palomitas de maíz, butacas rotas, la cantina, la hacienda e infinidad de detalles.

La protagonista “Paloma” es una mujer noble, pero también caprichosa, aguerrida y apasionada como María Félix; mientras que “José Alfredo” representa al hombre sensible como Pedro Infante, pero también al macho como Jorge Negrete.

La trama hace alusión a Blanca de Castejón en su papel de “Emilia Valverde” en “Escuela de vagabundos”; a “La Guayaba” y “La Tostada”, de “Nosotros los pobres” y “Ustedes los ricos”; también a la famosa “Eufemia” cuando le escriben su carta de despedida, entre muchos momentos del cine nacional.

No basta con ver la obra sólo una vez, se requieren varias veces para admirar a todo su esplendor dicha estampa mexicana que sobresale en lo visual, como la transición de las escenas en blanco a negro a color, la apreciación del mar y sus olas, la escena impactante de La Llorona y el final inesperado cuando todos regresan a la pantalla.

Al igual que “Mentiras”, este montaje, también del dramaturgo y director José Manuel López Velarde, con la escenografía magistral de Jorge Ballina, tiene todos los elementos necesarios para permanecer en el teatro durante una larga temporada.

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